Una crónica distinta

Si hay quienes atienden mis escritos, por motivos técnicos o ideológicos, esta vez se llevarán una sorpresa.

Voy por otro lado.

Tuve una importante regresión, y volví cincuenta años atrás.

Y volví a disfrutar “Menta y limón”,  “A mi cama”,  “Santa Lucía”, y muy especialmente “Yo quería ser mayor”…

No nos deslumbra su voz, ni la ejecución guitarrística depurada, como tampoco el afiatado grupo que lo acompaña musicalmente.

Son más bien, una postal anacrónica.

Pero la visita de Roque Narvaja (Mario Roque Fernández Narvaja), encabezando La Joven Guardia, en su presentación del viernes 12 de agosto, en Morón, trajo un mensaje delicioso a nuestro barrio.

Un personaje que alcanzó cierta notoriedad a partir de “El extraño de pelo largo” (hacia 1969), para pasar al rock melódico, con esos temas que mencioné.

Luego, la dictadura le “invitó” a exiliarse.  E hizo más de su música en España.

Ahora, piloto civil en Rosario (menos lejos de su Córdoba natal, pero ya alejado del Buenos Aires que le dio cobijo en sus primeros tiempos de rockero), Roque sigue haciendo lo suyo.

Y nosotros, agradecidos, lo informamos.

Edmundo Mario Zanini
eduardo.zanini@huellas-suburbanas.info