
02 Sep Muchos repudios: ¿el mismo repudio?
Una escalada de violencia viene ocurriendo desde hace mucho tiempo en nuestro país
¿Dónde va a llegar? ¿Tanto nos cuesta convivir con las diferencias?
¿Hasta dónde vamos a soportar ese odio destilado desde los medios masivos de comunicación?
Ahora llueven los repudios. Pues bien, repudiemos el discurso de odio que genera estos niveles de violencia que pudieron haber terminado en un magnicidio.
Repudiamos sí, repudiamos a quienes generan este clima de odio, a quienes hace años vienen trabajando sostenidamente en la generación del enemigo interno, ese que de a poquito va dejando de ser persona para convertirse en enemigo. No es un adversario, no es un rival, no es persona y así podemos deshacernos de “eso” que molesta.
Ahora vienen los repudios y mañana ¿arranca de nuevo la campaña del odio?
El mundo ha pasado por esto y créanme que ha salido mal ¿hace falta volver a recorrer ese camino?
Repudio sí, repudio el arma que se colocó sobre la cabeza de Cristina Fernández y también repudio todo el veneno que se viene destilando hace tiempo.
Ya lo dice el dicho: a las armas las carga el diablo y ya sabemos quiénes tienen el tridente en la mano ¿no?