El campo nacional y popular frente a las contradicciones de la gestión municipal

Por: Diego Di Santi

Partido Solidario Morón

Hace muy pocos días atrás, en la última semana de abril se presento para el debate en el Concejo Deliberante de Morón la propuesta del nuevo convenio colectivo de Trabajo que abarcaría a los y las empleados municipales del Distrito.

Convenio que viene a abrir una discusión postergada durante años en el ámbito municipal, en donde  se apunta específicamente al mejoramiento de las condiciones laborales de cientos de empleados y empleadas municipales a través de la configuración del escalafón, la carrera municipal, las licencias otorgadas y el pase obligatorio a planta permanente después de un tiempo razonable de trabajo.

Si bien la sesión quedó trunca por la falta de quórum (razonable ya que el gobierno de Tagliaferro sólo escuchó la opinión de uno de los gremios involucrados), recibimos con beneplácito que después de tanto tiempo se de la discusión efectiva para garantizar las condiciones laborales de tantos conciudadanos. Condiciones laborales esenciales, que como es sabido aquellos que se encuentran en los escalafones más bajos del gobierno son quienes más sufren la política del Gobierno de turno, además de ser los primeros perjudicados ante avances antipopulares como fue el despido al comienzo de esta gestión de decenas de trabajadores y trabajadoras municipales que se encontraban con contratos precarios, sin tener marco regulatorio (efectivo y aplicable) que los resguarde.

Lo que si no deja de llamarnos la atención, es que el actual gobierno local ahora manifieste preocuparse por el futuro de los y las municipales, cuando son los que dejaron en la calle a decenas de empleados como decíamos anteriormente, y los que vaciaron (así como ocurrió en la Nación) diversos programas e iniciativas promovidas en todo el País por los gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández

Un hospital municipal totalmente vaciado, carencia de programas y dispositivos sociales que den respuesta a diversas situaciones de vulnerabilidad, un Estado precario de los jardines y ámbitos educativos, una inexistente política pública que apunte a la promoción y efectivización de los derechos del pueblo, poniendo en su lugar iniciativas de corte asistencialista y proteccionista, y una pantalla vinculada a acciones tendientes al fortalecimiento de las medianas y pequeñas empresas del distrito, son sólo algunas de las tristes realidades que actualmente atravesamos. En más de 500 días de gestión, podemos decir que así como a nivel Nacional y Provincial, el actual gobierno local de Morón no ha tomado ni una sola medida a favor de los sectores populares. Al contrario, en estos tiempos se han encargando principalmente de generar negocios millonarios como es el caso de la nueva central de monitoreo, el metrobus proyectado a contramano de la opinión de los vecinos y vecinas, y los alimentos escolares eligiendo a los diversos proveedores oferentes  sin el debido proceso administrativo.

Si bien Tagliaferro y su equipo no tomaron ninguna medida en beneficio de los sectores más humildes, este año se encontraron con la aprobación sin mayores obstáculos tanto de un aumento descomunal del impuesto municipal (si lo comparamos con otros distritos, como La Matanza) así como la aprobación del presupuesto proyectado para este año. Entendemos que garantizar la gobernabilidad implica el sostenimiento de las instituciones democráticas y en trabajar por y para el pueblo, cosa que claramente Tagliaferro no hace, y no en si se aprueba o no un presupuesto. Presupuesto que no da ninguna garantía, sino todo lo contrario, de que sea invertido en las necesidades más urgentes de nuestra población.

En un contexto donde el mismo FMI proyecta una inflación de entre el 22% y el 24%, donde el PBI cayó 2,3%, donde en 2016 la inversión bajo el 5,5% y donde tenemos un millón y medio de nuevos pobres, aprobar un presupuesto municipal en donde solo la inversión en publicidad gráfica (10 millones de pesos) duplica lo invertido en participación comunitaria, adultos mayores y desarrollo económico habla a las claras de la intencionalidad de dicha presupuesto. Solo para darnos una idea, hay que tener en cuenta que en el 2016 el presupuesto total para -comunicación institucional- fue de 16 millones y medio, ascendiendo este año a alrededor de los 40 millones de pesos.

En este marco, claramente es inadmisible la propuesta salarial del Gobierno de Morón del 18% a los empleados municipales, así como no acompañamos la decisión de la aprobación del 35% de aumento al impuesto municipal que pagan todas y todos los ciudadanos del distrito.

Este ejemplo, como tantos otros, muestra que en estos tiempos que corren es urgente la necesidad y oportunidad de establecer estrategias colectivas, coordinadas y superadoras para frenar el avance de lo que se hace llamar el macrismo, o dicho de otro modo, la miseria planificada.

No podemos pensar en conquistar cada día más derechos (o en estos tiempos, defenderlos del avance neoliberal que busca avasallarlos) sin sentirnos y construirnos colectivamente todas aquellas expresiones del campo popular que bregamos por lo mismo. Más allá del lugar circunstancial que le toque a cada una, es necesario (y urgente) pensarnos en forma colectiva, tanto en la acción como en el debate y las propuestas, ya que lo que hay enfrente avanza por todos sin distinguir en colores ni espacios políticos y sociales.

Porque entendemos que actualmente no existe nadie en forma individual que pueda asumirse como la síntesis de las mayorías, creemos que es fundamental construir esa representación en Morón en forma colectiva, transversal y solidaria entre los diversos sectores del campo popular; porque para defender los derechos adquiridos no alcanza ya con un sector o espacio, sea quien sea, sino que será posible si nos sentimos construyendo colectivamente día a día en cada barrio, escuela u organización, militando y fortaleciendo la unidad como una síntesis casi natural de un proceso de trabajo, evitando de este modo el amontonamiento (a veces confundido como unidad) por el simple hecho de presentar una lista electoral. Creemos que así, será realmente posible el transitar este proceso infame para recuperar colectivamente el Gobierno de y para el pueblo de Morón y la Nación, y poder, en forma efectiva, construir una alternativa realmente superadora de los procesos actualmente existentes.