
01 Sep Por una Ley Oncopediátrica Nacional
El pasado 22 de agosto se congregaron grupos de padres, madres, familiares y personas con espíritu solidario, en la plaza San Martín de Morón, para juntar firmas, efectuar donaciones y contribuir a que cobre visibilidad el pedido para que se promulgue en el Congreso de la Nación la Ley Oncopediátrica Nacional.
Se trata de una iniciativa que cuenta con el acompañamiento de cientos de familias de todo el país, quienes impulsan y dan sustancia al proyecto en sí, que fuera presentado a mediados de septiembre del 2020 en el Congreso nacional. El mismo cuenta con número de expediente 4730-D-2020, y aguarda la decisión política de ser debatido y promulgado.
Cientos de padres de todo el país, con hijos que atraviesan distintos tipos de cáncer, continúan sumándose a este reclamo que inició Tania Buitrago a finales de 2019. Tania es mamá de Eliseo, un pequeño guerrero que lucha contra una leucemia, y es la autora del proyecto en cuestión.
El mismo propone la creación del Programa Nacional de Cuidado Integral del niño, niña y adolescente con cáncer.
En facebook difunden sus actividades a través de la página “Por los pequeños héroes – ley oncopediátrica”, y allí también se puede colaborar con donaciones para estos pacientes oncológicos y el necesario respaldo de la sociedad.
Actualmente, la diputada nacional Soher El Sukaria (PRO – Córdoba) es quien procura impulsar este importante y vital proyecto. 400 pequeños fallecen anualmente a causa de esta enfermedad.
Entre los puntos más relevantes del proyecto de ley – que aguarda tratamiento parlamentario- destacan que se otorgue un 100% de cobertura en la provisión de medicamentos, estudios, traslados y prácticas de atención de su estado de salud, con o sin obra social. Contemplan las licencias laborales con goce de sueldo. Además, que se les garantice una ayuda económica para las familias de menores recursos, equivalente al monto de la Asignación Universal por Hijo.
En ciertas circunstancias, muchos debates de índole parlamentario y ni que decir de los “bofes” de debates multimediáticos y/o por redes sociales se pierden en las roscas de pasillo o en aprobación de beneplácitos de espaldas a las necesidades más acuciantes, mientras un proyecto de ley, sensible como lo es el que nos ocupa en esta nota, aguarda desde hace 1 año para su adecuado tratamiento.
Es tiempo de menos palabras… y más derechos.