Las redes y la difusión del neoliberalismo fascista

Sabemos que las redes sociales son un actor esencial en la política en la actualidad, casi no quedan dirigentes políticos sin cuentas en las tres redes más usadas por los usuarios (Facebook, Instagram y Twitter). Pero detrás de la idea de “debate y pluralidad de voces” que se pregona con la existencia de estas herramientas aparecen cuentas y grupos de personas que sacan lo peor de si envalentonadas por una coyuntura sumamente derechizada. Y no estamos hablando de los famosos “trolls” del Gobierno…

Hace varios meses ya que por los medios más importantes de la Argentina deambulan personajes como Javier Milei o Jose Luis Espert (Milei es el economista con más tiempo en la televisión con 235 entrevistas entre diciembre del 2017 y septiembre del 2018, según un relevamiento realizado por Ejes de comunicación), ambos economistas ortodoxos que se dicen liberales pero que, en realidad, muestran un pensamiento sumamente fascista que detesta a la política y, sobre todo, a los políticos. Con un discurso burdo, sencillo, pero que pretende ser inteligente, estos personajes pretenden presentarse como “lo nuevo”, frente a “lo viejo” del sistema político actual, por supuesto que esto se ampara en lo que sucede en el mundo, y más recientemente en Brasil con el triunfo del ultraderechista Jair Bolsonaro.

Ahora bien, ¿qué tienen que ver Milei y Espert con la utilización de las redes sociales? Es que estos dos economistas son reconocidos y alabados por un grupo bastante nutrido de jóvenes de clase media-alta que en Twitter se identifican con el emoji (o emoticón) de una serpiente al lado de su nombre de usuario, autodefiniéndose  como “amantes del liberalismo” o “libertarios”. Su edad ronda entre los 16 y los 20 años, en sus opiniones políticas piden “desterrar al populismo” y caracterizan a Macri y a Cambiemos como “de izquierda”, si, aunque usted no lo crea. En resumen, representan lo peor del neoliberalismo actual: Liberalismo económico mezclado con fascismo político.

Decíamos que estos “liberales”, ven en Espert y Milei sus referentes ideológicos, algunos hasta se animan a pedirlos como candidatos a Presidente en 2019

Vemos entonces, un fuerte contenido reaccionario en su discurso, en línea con lo que despotrican diariamente Espert y Mieli, pero que no se aleja del clásico discurso liberal, que defienden la nula intervención del  Estado  en la economía, algo que, según afirman muchos economistas “liberales en serio”, el Gobierno de Macri no ha cambiado en comparación con el “populismo”, ya que la carga de impuestos siguen siendo alta, lo que no deja desarrollarse al sector privado de manera eficiente para que este genere empleo y se produzca el famoso “efecto derrame”, que, sabemos, nunca ocurre.

Estos “Miley-boys”, se ubican a la derecha de Macri al festejar el ascenso de figuras como Bolsonaro o Trump, que si bien no son del disgusto del Presidente, exponen un discurso mucho más duro que este. Es importante recalcar esto, porque, como se viene señalando hace varios meses ya, ante el inminente fracaso del Gobierno de Cambiemos y el pobre accionar opositor, reflotan estos personajes de ultraderecha (Olmedo es otro ejemplo que podemos mencionar) que buscan captar el discurso que ronda en “la calle” para hacerse eco del mismo y buscar alcanzar puestos de poder, incluso esto se empieza a observar dentro del propio Gobierno con la reflotación del tema de los inmigrantes. Ahora bien, ¿Por qué la preocupación por este fenómeno de “jóvenes libertarios” que aparece, mayormente, en redes sociales? En primer lugar porque, dado su edad, son quienes van a discutir las problemáticas del futuro, y esto es peligroso si se avizora un futuro impredecible sobre todo si se observa lo ocurrido en Brasil. Pero la preocupación también radica en que este grupo de personas se encuentra organizado, obviamente bajo una cuenta de Twitter, que se denomina “Partido Libertario” pero que no se limita a exponer las ideas mencionadas previamente, sino que organiza encuentros de debate entre sus integrantes para discutir sobre diversos temas, ya sean de actualidad o cuestiones ideológicas.

Por supuesto que no podemos atribuir algo que sucede en el microclima de las redes sociales a un contexto global de la sociedad argentina. Pero si es cierto que el discuro “anti-politica” viene de larga data en nuestro pais y si esto se traduce en quienes luego van a participar de las decisiones politicas mas importantes estamos ante un problema serio, dado que no es un discurso “apolitico liberal” que se queda estatico y solo se limita a despotricar contra los dirigentes en general, sino que tiene una entidad, tiene referentes y tiene ideas que están en el antagonismo del bienestar de las mayorías populares.

Los dirigentes de la oposición no han podido deben tener en cuenta como se mueve la juventud, tanto aquella que milita en los partidos históricos de la Argentina como la que se viene gestando en las redes y que busca convencer a la mayoria de la población con argumentos que no la favorecen en absoluto, sobre todo si el contexto global nos devuelve situaciones como la victoria de Bolsonaro en Brasil.

Alejo Spinosa
alejo@huellas-suburbanas.info