La resultante del “darles tiempo”, en primera persona

Finalmente, el día llegó. Esta tarde, mientras recorría una de las más grandes galerías comerciales de Morón centro -donde alguna vez tuvimos la oficina/imprenta de Huellas Suburbanas, para quienes la conocieron en dicho lugar- entablé amena conversación con el encargado del turno tarde-noche. Siempre lo hago. 


En esta oportunidad, y viendo que tamaña galería, con entrada y salida a cuatro calles y a tan sólo 100 metros de la estación Morón, era transitada por apenas un puñado de personas, tipo 19 horas, con más ánimo de «mirar vidrieras» que de ingresar a comprar… efectué la pregunta de rigor.

 

«¿Cómo anda todo por acá?» A lo cual el consultado, digamos de ahora en más, el Señor X, respondió escueto y elocuente:
«Está todo parado, nadie compra y no paran de cerrar, poco a poco, los comercios». 


Viendo que su gesto era por demás apesadumbrado, pero recordando el énfasis que no demasiado tiempo atrás, él mismo le ponía a la teoría del «darles tiempo», busqué un punto conciliador:
«Debe ser porque estamos en pleno Enero… ya va a repuntar».

 

Rápido, el Señor X me devolvió el lanzamiento con otra afirmación bastante interesante:
«Para nada, esto viene de arrastre. Ahora porque es Enero, pero la caída viene desde hace rato y no para. Si para marzo no repunta mucho, no sé qué vamos a hacer todos acá».

 

Volví a esgrimir una consulta, aparentemente desde un absoluto desconocimiento y desentendimiento del asunto:
«¿Y desde cuándo viene ese arrastre del que hablás en la caída de las ventas?».
«Exactamente desde que gobierna Macri. Se derrumbó todo y nunca más repuntamos acá».

 

Si bien con eso ya tenía suficiente testimonio de quien convive a diario con más de 60 locales y 32 oficinas en la planta superior, me animé a preguntarle por sus venideras vacaciones, a lo cual culminó la breve entrevista encubierta con un lapidario:
«me las suelo tomar, como vos sabés, en marzo. Pero este año es muy probable que no me pueda ir a ningún lado. Ya te digo, si no repunta mucho en marzo, acá van a cerrar varios y mi laburo también va a estar en riesgo».

 

No más comentarios. El señor X, al igual que varios de los que allí desarrollan o intentan sobrevivir con sus actividades comerciales, ya no tienen ánimo de «darles tiempo» a quienes los refundieron sin piedad en estos últimos tres años.

Daniel Chaves
dafachaves@gmail.com