
09 Sep “La perspectiva que deja este gobierno es horrible por donde se la mire”
Entrevista a Eduardo Macaluse, diputado nacional (M.C.)
Eduardo Macaluse, intelectual, docente, actualmente trabaja en la escuela Media N°23 de Laferrere y en una institución educativa privada del centro de Morón. Supo defender intereses populares y del desarrollo nacional desde su banca de diputado nacional (2007-2011). Actualmente confiesa estar alejado de toda estructura político partidaria, quizás con un dejo de desilusión que no escapa al sentir de muchísimos compatriotas.
Accedió a conversar con Huellas Suburbanas en un café céntrico de la ciudad de Morón, y se extendió sobre una muy amplia diversidad temática, desde un enfoque independiente, rico en análisis y perspectivas posibles.
Panorama económico y político
Sostuvo el entrevistado que “En el mundo se viene afirmando la supremacía del sector financiero sobre el sector de la economía real. En muchos países la estrategia para enfrentar esta situación es volver al proteccionismo, como los propios Estados Unidos. China tiene una estrategia continental con la creación de un banco de fomento de crédito con mucho dinero que inyecta en economías de países emergentes –y algunos sumergidos. Surgen entonces las turbulencias entre Estados Unidos y China, que derivan en una guerra comercial que genera inestabilidad. Y en ese marco, Argentina opta por la peor opción, sale a mar abierto sin salvavidas, sin equipo de buzos y sin botes. Y se cae la única estrategia que tenía el gobierno, quienes pensaron que porque eran sus amigos, los inversores iban a desembarcar acá. Bajaron las retenciones, liberaron el precio del petróleo, quitaron todo tipo de control a la compra y venta de divisas: no podían haber elegido una peor estrategia para un país que históricamente ha tenido problemas para hacerse de divisas, sumado a que la forma que aplican es que paguemos los platos rotos los que menos tenemos”.
El bloque regional y las alternativas
Indicó Macaluse que “El gobierno desacreditó primero y contribuyó a destruir la UNASUR. Que si bien era una estrategia precaria que consistía en tratar de colgarse como furgón del BRICS como fuera, pero por lo menos era una estrategia común. Y también destruyeron al mercado interno. Por lo tanto no hay ninguna perspectiva de que esto pueda terminar bien. Para colmo le entrega el monitoreo de la crisis al FMI. La perspectiva que deja este gobierno es horrible por donde se la mire”.
¿Hay plan B que sea inconfesable?
“Creo que es un único Plan A. es una coalición de sectores económicos que se unieron para llegar al gobierno y cada uno reclama manotear lo que pueda. Por ello surgen medidas contradictorias, como bajar la inflación y liberar el precio de la energía, bajar las retenciones y bajar el gasto público”
¿Creés que están dispuestos a durar un solo período y entregar el poder, o han un plan B ligado a la militarización de la sociedad, a pulverizar el Estado de derecho…?
Buscan dejar un país ingobernable para un gobierno popular. De eso nunca tuvieron dudas. Y creo que todo ello formaba parte de un único Plan A. algunos de ellos pensaron que todo esto podían hacerlo gradualmente para durar dos períodos, pero los sectores económicos que los sostienen ahora los empujan para avanzar todo lo que se pueda frente al disconformismo creciente entre amplios sectores de la sociedad.
Urge entonces, disponer de un plan de contingencia opositor. ¿Cómo ves el estado actual de la construcción política en tal sentido?
Antes que pensar en ello, debemos preguntarnos qué habremos hecho nosotros en los últimos años, como para que la mayoría de la gente haya optado por alguien como Macri, y no a las opciones que nosotros presentamos. Sin esa respuesta, es muy difícil superar esta etapa. No todos tenemos la misma respuesta, lo cual podría generar dispersión electoral, ese es otro dato. No hemos acertado en generar una opción de mediano y largo plazo, una propuesta estratégica. UNASUR permitía tener una idea de proyección, y por ahí no se hicieron suficientes esfuerzos como para sostenerlo una vez que no estuviesen al frente de cada país los líderes que lo impulsaron.
La idea del Banco del Sur terminó siendo otra ilusión perdida…
El Banco del Sur era una opción muy buena para favorecer a nuestras economías, pero no hubo inversiones de los países que tenían más para aportar, tales los casos de Brasil, Venezuela y Argentina. Se dio una disputa por el liderazgo, fundamentalmente entre Chávez y el PT brasilero, lo cual también conspiró para sembrar confianza para aportar dinero fuerte de cara al sustento de un banco de esa envergadura. Otro grave problema es la generación de recaudación en negro. O decidís ser un gobierno popular y te cuidás porque a vos no te la van a perdonar nunca. No puede haber ningún sistema de recaudación paralelo…
Buena parte de la ciudadanía exige mil pruebas de amor a los gobiernos populares…
… exactamente, y no le toleran lo que sí le soportan a gobiernos de otras líneas ideológicas. Y esa contradicción pega en la línea de flotación a cualquier propuesta futura. Tampoco podemos comernos el caramelo de que los únicos corruptos son las empresas argentinas, brasileras, ecuatorianas que les ganaban las licitaciones a las empresas norteamericanas en Latinoamérica y en los propios Estados Unidos. Cae Odebretch, tambalea Techint, no es casual la selección de esos blancos, ni tampoco es casual que todo esto aparezca por un cuadernito de carnicero que ni siquiera apareció…
Y ello en un contexto donde sí aparecieron bien probados los aportes truchos de Cambiemos…
Los aportes de campaña, que hasta probablemente tengan a los mismos actores empresariales involucrados. Si tantos todopoderosos aceptan ir a declarar, si se toma como válida una fotocopia, es que la decisión procede de mucho más arriba. Todo responde a una estrategia continental de los Estados Unidos. Y también creo que había un sistema de recaudación paralelo a una escala enorme, y eso hace imposible que se sostengan los gobiernos populares en el tiempo.
¿Cómo se financiaría, entonces, un gobierno popular luego de esta crisis? ¿Cómo se genera una recuperación económica, qué medidas debería aplicar para no caer en esas prácticas y al mismo tiempo tener el financiamiento suficiente para re enderezar la economía?
Los controles que corresponden al Estado no pueden quedar en manos de los tipos que fugan las divisas. Mínimamente tiene que haber un control del comercio exterior, y probablemente la nacionalización del mismo. La otra es impedir que las divisas que se generan gracias a materias primas o a trabajo argentino, salgan de las fronteras sin control alguno. Y la cuestión de la deuda externa: Argentina paga una deuda cuyo origen es espurio. Los que se dicen acreedores no lo pudieron demostrar con documentaciones, y Argentina fue aceptando en distintas reestructuraciones de la deuda, de algún modo, la validez de la misma. Hay que investigar la deuda externa, y eso requeriría una estrategia común con el bloque regional. Todo esto en un contexto donde estamos yendo hacia un mundo en el cual los trabajadores viven cada vez peor, en Europa misma esto está sucediendo, y este horizonte puede implicar volver a un nivel de vida como teníamos en el siglo XIX.
¿Se están terminando de pulverizar los últimos restos del viejo Estado de Bienestar europeo?
Sí, definitivamente, y lo está haciendo el poder financiero de manera consciente, planificada. Fijate en la experiencia griega, cómo te trituran los huesos. A Alex Tsipras lo devolvieron como un Chicago Boy… tienen el poder y lo ejercen. Ahora, los pueblos no son tontos, y tarde o temprano vamos a poder pelear contra todo esto. De momento falta organización de las masas populares, y sin una estrategia unificada podemos repetir la derrota fuerte que soportamos durante el menemismo.
Argentina tiene un “petróleo verde” que es su pampa húmeda, como fuente fundamental de financiamiento. ¿Qué hacer con respecto a las retenciones?
Las retenciones son un instrumento muy valioso, y todos los gobiernos tienen derecho a establecerlas. No son un impuesto, es el Estado en su derecho a tomar parte de una ganancia extraordinaria. Hay que tener un sentido de la oportunidad y una estrategia para el sector. Por ahí ingresan buena parte de los dólares que recibimos. Y ese sector está tremendamente concentrado: En la soja el 80% de los productores produce el 30% y el 20% restante genera el 70% de la producción. Se tiene que gravar a ese 20% para no generar un conflicto con los pequeños sectores agrícolas. Un proyecto nacional debe tener como aliados a los pequeños y medianos sectores agropecuarios e industriales. El error del gobierno kirchnerista fue no haber desagregado del conflicto a la mayoría de los productores. Sacar a la FAA y probablemente a la CRA de la Mesa de Enlace, y así el gobierno se hubiera quedado con un 70 u 80 por ciento del dinero en disputa y dejaban sola a la Sociedad Rural en una estrategia de confrontación. Hay que lograr acuerdos, discutir toda la línea de producción agropecuaria; los productores lácteos no pueden ser el eslabón más débil de la cadena productiva. Y es muy difícil, porque por otra parte el sector agropecuario tiende a unirse entre ellos para terminar demandando al gobierno.
Pareciera que falta planificación en casi todos los aspectos…
Es que se obra sobre la coyuntura, y por lo tanto se obra por desesperación. Por ejemplo, se necesitan instalar políticas activas de respeto al medio ambiente. Y ello implicará que en algún momento el Estado pierda inversiones, pero también va a significar que nuestros nietos no vivan en la miseria. Es muy difícil cuando no dan las cuentas en el ejercicio actual que alguien diga no vamos a recibir inversiones en Vaca Muerta porque el Fracking está comprobado que genera daños irreversibles. El Estado deberá planificar qué se va a aceptar, y qué no. Pero la tentación para el gobernante de turno es muy grande, sobre todo como fuente de obtención de divisas y financiamiento interno. Para colmo las potencias ven todo ello y ya asoman bases militares; no está en claro qué hacen los chinos en Neuquén, hay bases que se supone son secretas de los Estados Unidos en Misiones, en Corrientes… lo peor que nos podría pasar es que los custodios del medio ambiente fuesen las grandes potencias, porque se van a apropiar de todo. Hay que articular los intereses medioambientales, económicos y militares, para proteger un recurso escaso. Lo cual permitiría otorgarle a las Fuerzas Armadas una hipótesis de conflicto externa y que el adversario o enemigo lo sea realmente, y evitar de paso que las mismas se dediquen a la seguridad interior.
Te llevo a la educación. ¿Observás un deterioro deliberado o por mera mala gestión del sistema educativo público, tanto provincial como a nivel nacional?
Tienen la decisión de no poner dinero. No es deliberado por perversión, lo es en el sentido que establecen prioridades dentro de las cuales no tienen a la educación. María Eugenia Vidal recibió el Fondo de Reparación Histórica como ningún otro gobernador tuvo en toda la historia de la provincia. Y no destina ese dinero ni a la educación ni a la salud. Es más, toma disposiciones para recortar gastos. Eliminan los gabinetes, los chicos y los padres llegan con serios problemas psicológicos por las condiciones de vida que atraviesan… trabajamos con menos de lo mínimo indispensable, y al gobierno le parece que sigue siendo mucho. Muchas veces quienes gobiernan no pasaron por el sistema educativo público, entonces tienen una idea equivocada de lo que pasa en las escuelas, desconocen cómo se trabaja, cómo asisten los pibes y los docentes. Hay gobiernos que invierten más. El de Cristina invirtió más, el de Néstor Kirchner y hasta el de Eduardo Duhalde lo mismo, pero no hubo la posibilidad de sentarse a discutir qué cosas se podían hacer con esa inversión. Este gobierno directamente no quiere invertir, no quiere sentarse a dialogar, recorta derechos a los docentes y presupuesto educativo. Nos llevan a una situación caótica. Mientras tanto van cobrando vidas humanas. Vivimos a escala global en una época de transición en el aspecto educativo, y hay una clara falta de comprensión acerca del rol que debe cumplir la escuela.
A modo de cierre, ¿Qué masa crítica considerás adecuada que se debería articular para construir un proyecto popular y nacional perdurable y, por supuesto, viable para recuperar el poder?
Básicamente la pequeña y mediana industria y pequeños y medianos productores rurales, trabajadores urbanos, las organizaciones sociales que están conteniendo la debacle socioeconómica… y no todo el sindicalismo. Siempre es bueno que haya unidad sindical cuando nos oponemos a determinado asunto. Ahora, hay algunos sindicalistas con los que uno sabe que hay límites, que hay cosas que no van a hacer, cosas que no quieren o no les interesan y están dispuestos a sentarse a conversar para negociar sus propios intereses. Es buena la unidad en determinado momento, pero sepamos que en la primera de cambio, esa clase de dirigentes te dejan a pata.
Fotografías: Edmundo Zanini