“La candidatura de Cristina Fernández puede ser un factor ordenador del campo nacional”

Reportaje a Hernán Solito, presidente del Partido Justicialista de Morón
Por: Roberto Coluccio y Daniel Chaves

Hernán Solito, presidente del Partido Justicialista de Morón. Racinguista acérrimo que no se privó de analizar, café de por medio, la actualidad del equipo de sus amores en el plano futbolístico, conversó con Huellas Suburbanas en la aparente serenidad de una mañana poco transitada por el centro comercial de Morón.
Pero no era “la academia” y sus sueños de campeón lo que nos convocó esa mañana, sino para desmenuzar un poco la actualidad política general y la de su otra gran pasión particular: el peronismo de Morón.
Resuelto, indicó que “nosotros estamos trabajando para lograr la unidad del peronismo en Morón” si bien anticipó que “puede que haya algún espacio que no tenga la misma voluntad”.

Massa y Bossio
Consultado al respecto, posicionó a la militancia que acompaña los dictados del diputado Diego Bossio como “más cerca de Sergio Massa que del PJ, después, mientras haya buena voluntad son bienvenidos todos los compañeros, lo que sí me llama la atención es que –con respecto al otrora dirigente de la Anses- haya estado 12 años en un lugar y luego piense inversamente proporcional a lo que sostenía”.
En referencia al massismo, sostuvo que “compiten con Cambiemos en el nicho de votantes, más que con nosotros. Cuando Sergio Massa enfrenta al gobierno nacional, decae su imagen, y cuando lo apoya, sube. Lo cual no le permite despegar plenamente de esa trampa”. Asimismo, advirtió que “aún no está claro siquiera si Massa va a ser candidato, de hecho lo mismo sucede con Cristina. Se aproximan dos meses de muchas tensiones producto de reposicionamientos que van a darse, y después se verá el reacomodamiento general”.

Kirchnerismo y Peronismo
Supeditó la interna a la decisión que tome Cristina Fernández de Kirchner respecto a candidatearse, o no. Lo cual entrevé como un “factor ordenador del campo nacional, yo no veo a nadie jugándole una primaria a Cristina”, disparó.
El dirigente también abordó una observación a nuestra consulta respecto a las rispideces que se han venido vislumbrando para el común de la ciudadanía, entre el peronismo más “orgánico” y el kirchnerismo de raíz no peronista. Ante lo cual propuso un frente electoral como vía de reunificación y evalúa como “saludable” que haya una discusión “sana al interior del proceso de unidad frentista”; no obstante enfatizó la necesidad de que ello no implique “descalificarse entre compañeros”, y aprovechó para marcar distancias del Nuevo Encuentro: “Por ejemplo, yo tengo un gran respeto por la militancia de Nuevo Encuentro, por su dirigencia me cuesta un poco más, ya que no entiendo por qué le votaron a la intendencia el Presupuesto, los poderes especiales a Tagliaferro, y el aumento de tasas. Cuando votás eso, estás convalidando el proyecto político que lleva adelante Cambiemos en el municipio” sintetizó.

Cristina, ¿Consolida la unidad intersectorial o potencia esta puja tan visible?
“Cristina es una dirigente política pragmática y es la que más volumen político y formación personal posee, que no está pensando en pequeñeces y toma decisiones más allá de lo que le sugieran, o no, los sectores que podemos denominar ´kirchnerismo puro´” arremetió. Fiel a su mensaje de sostener autocríticas frontales que tiendan a construir y no a la inversa, admitió fallas en la comunicación “fue una herramienta mal empleada para transmitirle a la sociedad el proyecto que se venía desarrollando y hacia dónde se apuntaba avanzar”.

Cambiemos
Abordó, a vuelo de pájaro, las limitaciones del frente Cambiemos, dentro del cual visualiza “una improvisación producto de distintos intereses encontrados, todos tienen los mismos tiempos, cada cual tira para el sector que representa, y se traduce en la falta de orden que exponen cotidianamente. Demasiada puja entre Ceos demuestran a diario que Mauricio Macri no es la conducción de Cambiemos. De hecho Cambiemos no tiene candidato firme para estas elecciones de medio término, van a intentar plebiscitar la economía, pero, ¿cómo va a estar la economía en julio?” se preguntó, al tiempo que compartió su intuición de una continuidad del proceso económico que se viene arrastrando a lo largo de los primeros 15 meses de gestión.

Peronismo en Morón, ¿Misión posible? ¿Por qué la ciudadanía debería volver a votar al peronismo local?
Llegado este punto, Hernán fue claro y tajante: “Ha costado elaborar propuestas superadoras en los últimos 20 años, porque en ese tiempo hemos ganado elecciones provinciales y nacionales. Un problema serio han sido las divisiones del peronismo, que estamos tratando de solucionar. A ello contribuye el arribo de muchos compañeros nuevos y un cambio de actitud de los compañeros grandes; hay un recambio generacional sin las peleas internas que existían antaño. Solucionado este aspecto, debemos construir y saber mostrar una opción superadora. Los últimos años de gestión de Lucas Ghi no fueron buenos; se tiene que evidenciar qué tipo de municipio querés y cómo pretendés construirlo. Y la gestión actual aún no logra salir a mostrar un cambio radical que los distinga. Tenemos que trazar un proyecto rumbo al 2019, sabiendo con claridad hacia qué tipo de distrito queremos avanzar”.

El rol del Movimiento Obrero
No anduvo con preámbulos en este aspecto: “A la dirigencia gremial se la están llevando puestas las bases. Hay que compatibilizar intereses… pero realmente se tendrían que haber dado cuenta antes de lo que se venía, porque pasamos de discutir Ganancias a que no se pierdan puestos de trabajo”, y redobló la apuesta al recordar que “lo peor de todo es que, al mes de asumir, los amenazó Alfonso Prat Gay, así que los compañeros del movimiento obrero no se pueden justificar diciendo que no sabían lo que iba a suceder. Ahora son parte del reacomodamiento general, también influenciados por las bases que los superan, incluso desde lo más elemental y dramático, que es el miedo a perder el trabajo”.

El presente financiero y el drama por venir

Se mostró preocupado por el crecimiento exponencial de la fuga de capitales “a pesar del éxito del blanqueo, pero es una medida extraordinaria que no se puede repetir todos los años. Y va a ser muy complicado de desarmar todo el entramado y los compromisos adquiridos por los grupos de poder financiero: Va a llevarle tiempo a quienes vengan después de Cambiemos, y pretendan reconstruir un proyecto de país industrial”, anticipó no sin entrever un panorama cuando menos, incierto.