El Transformador, de Haedo, está en riesgo de desalojo

La asociación civil El Transformador de Haedo está corriendo riesgo de desalojo: La casona donde funciona pertenece a la familia del ex gobernador Manuel Antonio Fresco. Es de esperar que no resuciten los viejos fantasmas de quien fuera gobernador de la provincia durante la “Década Infame”, gestor de prácticas fraudulentas, crítico de la Ley Sáenz Peña, en un territorio donde la violencia prevalecía por sobre las propuestas para doblegar a los opositores.

El Transformador se encuentra en medio de un juicio por desalojo.  En el año 1992 la propiedad había sido declarada Monumento Histórico de la Provincia de Buenos Aires, disponiéndose su expropiación para instalar un centro cultural. Nada de eso sucedió y luego del complicado comienzo del siglo, en 2003 se instala, con permiso para su funcionamiento, El Transformador.

En varias ocasiones los han querido sacar de la propiedad, hasta que llega al año 2013. En aquel momento se sancionó una ley de expropiación, que por cinco años frenaba el desalojo. Al igual que en aquel 1992, la ley no efectivizó sus postulados y se perdió una nueva oportunidad, llegando al 2018.

Se solicitó a Diputados la Expropiación Definitiva, y se obtuvo media sanción del proyecto de ley para suspender por 180 días el desalojo de la casona, tras lo cual, el Juzgado 11 de Morón frenó el desalojo.

Desde sus inicios, allí se han desarrollado más de 180 talleres.  Artistas locales han podido desarrollar encuentros culturales “a la gorra” facilitando el acceso a toda la comunidad. También funciona allí la Biblioteca Popular «Rayuela».

También cabe resaltar el funcionamiento de un Centro de Día, en el que muchos menores en situación de calle encuentran un lugar que los cobije.

Las actividades que desarrolla «El Transformador» apuntan a mejorar la convivencia social entre todos: familias, vecinos y organizaciones sociales tienen un espacio que los puede aglutinar. Es por ello que sería más que interesante  que pudieran contar con un “plan B” para el hipotético caso de que pudiesen fallar las instancias que eviten el desalojo.  Respaldando esta posibilidad, por ejemplo, el Municipio podría prever la cesión de un espacio donde esta organización civil pueda continuar funcionando.

Juan Carlos Dennin
juancarlos@huellas-suburbanas.info