Día Internacional de La Educación

Hoy 24 de enero se conmemora en todo el mundo el “Día Internacional de La Educación” (UNESCO).

La Asamblea General de las Naciones Unidas proclamó el 24 de enero Día Internacional de La Educación, se busca resaltar en esta celebración el papel que la educación desempeña en la paz y el desarrollo.

En esta ocasión se conmemora la quinta edición del Día Internacional de la Educación (24 de enero).

No tenemos ninguna duda que la educación es un derecho humano, un bien público que debe ser construido con una responsabilidad colectiva.

El derecho a la educación está consagrado en el artículo 26 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. La declaración exige la educación primaria gratuita y obligatoria. La Convención sobre los Derechos del Niño, adoptada en 1989, va más allá al estipular que los países deberán hacer que la educación superior sea accesible para todos.

En La Argentina, la pandemia del COVID 19 y la crisis económica está afectando el derecho a la educación, con el consiguiente daño desde múltiples aspectos, sobre todo a los niños y los jóvenes.

La educación ofrece a los niños y las niñas una oportunidad de salir de la pobreza y un camino para alcanzar un futuro prometedor.

Como en muchos ámbitos, la Pandemia del COVID 19 y las medidas de contención y prevención (cuarentena) permitieron visibilizar y profundizar las fallas sistémicas estructurales del sistema educativo argentino.

Sin una educación de calidad, inclusiva y equitativa para todos y de oportunidades de aprendizaje a lo largo de toda la vida, los países no lograrán alcanzar la igualdad de género ni romper el ciclo de pobreza que deja rezagados a millones de niños, jóvenes y adultos.

Para lograr una democracia más libre y equitativa, el acceso a la educación es fundamental y para ello, es esencial que exista una democratización en la educación. Quienes integramos y sostenemos a la educación, la entendemos como uno de los principales ejes de toda política pública a realizar. No hay democracia si no se empieza por enriquecer y mejorar la educación.

No hay posibilidad de construir una sociedad más justa si esta situación no se revierte. El desafío es muy importante pero imprescindible para que la educación vuelva a tener el espacio que nunca debió perder en la sociedad, como motor del cambio y de expectativa de ascenso social.

En el «Día Internacional de la Educación” volvamos a colocar a la misma en un lugar central de nuestra sociedad.

Javier Argolo
javier.argolo@huellassuburbanas.com