
08 Ago Charla “Contexto económico: El futuro de las pymes argentinas”
El pasado 27 de julio se desarrolló esta actividad en el Centro Cultural Bartolina, de Morón. La misma contó con la participación del economista Mariano Kestelboim, y la organizó la agrupación “Ministro José Ber Gelbard Morón” en el marco del 5° aniversario de la misma.
El rico panel estuvo integrado, además del mencionado economista, por Ariel Aguilar en representación de “La Gelbard” y por el dirigente de Nuevo Encuentro Morón y otrora intendente municipal, Lic. Lucas Ghi.
Ariel Aguilar realizó una introducción en la cual recordó los orígenes de la agrupación Ber Gelbard cinco años atrás, y evocó compromisos y acciones llevados adelante desde la Dirección Pyme del municipio de Morón, durante la gestión de Lucas Ghi.
Destacó que desde el sector empresarial “hay quienes empiezan a entender la necesidad de agruparse. No importa a quién hayan votado: Nosotros tenemos una responsabilidad política que es acompañar a esa persona, esa es la construcción que nos tenemos que dar ahora. Explicar, escuchar, hablemos de producción y de progreso, el empresario crea una empresa para ganar dinero es lógico, pero que sea siempre en el marco de la redistribución para que se garantice el crecimiento colectivo”, resumió.
A su turno, Lucas Ghi reclamó que el proyecto político que busque recuperar el distrito “debe sostener las banderas de la producción, el trabajo, el mercado interno, la generación de manufacturas”. Disparó que “No creemos en la mano invisible del mercado; somos fervientes militantes de la mano visible del Estado. Un Estado que interviene, que toma decisiones, que regula, que administra y que tiene como horizonte el interés de las grandes mayorías”.
Asimismo, sostuvo que el problema de fondo en la política gubernamental “es el modelo de primarización y endeudamiento, de volver a quebrar el aparato productivo” que aplica la actual gestión.
La palabra de Kestelboim
Lanzó una afirmación contundente ni bien inició su exposición: “Este tipo de gobierno no puede subsistir mucho tiempo en Argentina, no van a tener un segundo mandato, pero están haciendo un desastre económico impresionante: Van a dejar ruinas muy difíciles de remontar, lo cual obligará a trabajar con suma inteligencia para entender cómo funciona la política, y cuáles son las artimañas que nos plantean para tratar de permanecer en el poder, y si tienen que dejarlo, abandonarlo con un verdadero campo minado, una situación delicadísima a todo nivel. Desde la deuda generada, la destrucción de las capacidades productivas, una exclusión tremenda, pobreza, indigencia, marginación. Así que la reconstrucción va a llevar mucho tiempo”.
Realizó un repaso por las políticas económicas aplicadas por la gestión Cambiemos, y también brindó un recorrido a vuelo de pájaro por las principales crisis y desarrollos económicos internacionales durante el siglo XX.
Entre sus definiciones más destacadas, recordó que desde el 2002 en adelante “avanzó un modelo fuerte de inclusión social, de recuperación de las capacidades productivas, con una organización de los mercados relativamente planificada pero con deficiencias a raíz de que la gestión de aquel momento tenía que soportar que en los años anteriores se había destruido mucho la capacidad estatal de regulación de los mercados”.
Reconoció que aquella “fue una etapa en la que se siguió con los problemas inflacionarios pero se recuperó la capacidad productiva”.
Por el contrario, señaló que “desde el arribo de Macri a la presidencia, nuevamente estamos en un esquema agroexportador con negocios financieros especulativos”.
Comparó que la actual deuda externa contraída por el gobierno de Cambiemos es proporcionalmente superior a la que adquirió la última dictadura cívico militar e incluso durante los años de la Convertibilidad.
Criticó que el macrismo “está poniéndole un énfasis notable al déficit fiscal primario como el origen de todos los problemas y se manda la parte diciendo que sobre-cumplen esas metas fiscales. Y todos los economistas de derecha remarcan en los medios de comunicación que la solución pasa únicamente por reducir este aspecto. No tengan dudas de que lo van a lograr, bajarán el gasto público, reforzarán los despidos, reducirán la obra pública y aumentarán la recaudación a través del aumento de las tarifas de los servicios públicos. A fin de año el gobierno se va a mostrar poderoso con este eje, pero no dirá que incumple todos los otros ítems, muchos más importantes como lo son el nivel de endeudamiento externo atroz, el nivel de precarización laboral… por otra parte el déficit externo que es la relación entre lo que Argentina compra y vende, más los pagos de intereses al exterior y lo que las multinacionales remiten de utilidades al exterior en los últimos 12 meses fue de 35 mil millones de dólares, que representa más del 5% del PBI… fíjense que el préstamo que le otorga el FMI en cómodas cuotas hasta el 2020 no alcanza en tales condiciones”.
Apeló al compromiso de la militancia para lo que se viene, y al respecto advirtió que el país tiene “una economía muy frágil por el desequilibrio que ha avanzado en sus cuentas externas, que tiene que ver con la liberalización del comercio y las finanzas; si llega a haber un resfrío a nivel internacional, lo vamos a padecer mucho porque los capitales financieros se van a ir volando. Este desequilibrio externo está siendo tratado de suavizar con este mayor grado de dependencia con los mercados financieros internacionales”, explicó.
También exhortó a no bajar los brazos “porque esto no se va a poder sostener, va a terminar en una gran crisis, y va a hacer crack…” aunque subrayó el “temor” que le genera “en este contexto el rol que puedan tener las Fuerzas Armadas, porque va a haber represión, va a haber problemas de gobernabilidad”, lamentó.