
08 Jun Ariel Díaz, dirigente del peronismo local, y un deseo: “Construir la cultura del encuentro en la diversidad”
Ariel Díaz, abogado de profesión, en la actualidad es referente de la Casa Peronista “Segunda Independencia” y de Kolina Morón. Posee un fuerte vínculo con el intendente Leo Nardini, de Malvinas Argentinas, y se reunió para conversar con Huellas Suburbanas en pleno corazón comercial de Morón, acerca del escenario electoral y en particular, del dinámico aunque complicado momento que atraviesa el denominado Movimiento Nacional y Popular.
¿Es posible alcanzar, sino para agosto al menos para Octubre la unidad del campo nacional y popular, tanto a nivel provincial como municipal?
Pienso que sí. Me parece que en la unidad de acción hay muchos actores con buena relación y se van a juntar para las primarias, pero en la unidad de concepción hay un solo enemigo, que es Macri; las primarias servirán para limar algunas diferencias. Van a acomodar las contradicciones, no habrá vencedores ni vencidos, eso se va a dar en Octubre.
¿Encontrás déficits en la construcción orientada a lograr una nueva mayoría, que puedan ser subsanados en un relativo corto plazo?
Las contradiciones que teníamos en nuestro campo, desde antes de las elecciones de 2015, siguen subsistiendo. No hubo autocrítica real. No discutimos lo que nos dividió, y decidimos construir hacia adelante. Si la contradicción no deja de existir, se hace difícil… si bien el “espanto”, que es Macri, nos va a terminar juntando.
Es un facilitador…
Es un facilitador de cosas Macri (risas), pero no veo que sea sencillo corregir esos errores. Corremos el riesgo de que se desvalorice la política, y que la sociedad termine de incorporar la idea de la no-política. Incluso puede pasar algo similar en Brasil, y si no somos inteligentes, puede volver a ocurrir acá.
No siempre fue bien explicado qué era “el proyecto”. Y yendo hacia un proyecto municipal, ¿Cuál es el aporte que el peronismo puede ofrecer en tal sentido? ¿Qué ejes deben construirse para forjar un camino superador respecto a la gestión actual?
El peronismo tiene que conseguir la felicidad de la gente. La gestión actual no está junto a la gente sino a los sectores que más tienen. No se solucionó la problemática del tránsito, los proyectos de seguridad son una fachada, en lo concreto la inseguridad se incrementó. Y entra en juego el factor económico, que propicia que sectores desprotegidos se vean empujados al delito. Entonces generan más desigualdad, que viene acompañada de esta posibilidad que muestran los datos concretos de la realidad. Están incrementando a los ciudadanos que deben vivir de changas, eso no se veía a tal escala hace dos años. Volviendo a Morón, hay sectores de la iglesia más preocupados por asistir con alimentos a las personas que viven en Plaza La Roche que la propia municipalidad. No se ha evidenciado nada concreto para mejorarle la vida a la gente. Los negocios cierran cada vez más y tiene que ver con un contexto nacional. No han sabido rescatar lo mejor de la gestión anterior, que tampoco era la excelencia… pero no nos sirve mirar para atrás.
Y desde el peronismo, ¿Qué diferencias pueden existir entre los sectores que eventualmente apoyen a una candidatura de Florencio Randazzo, y aquellos que sostengan una candidatura, supongamos, de Cristina o en un plan B, Verónica Magario ú otro?
El peronismo tiene distintas vertientes desde siempre. Todos constituyen al peronismo en su conjunto. Cuando se ve la posibilidad de competir, se compite, y eso es lo que está pasando. Luego de agosto la unidad ya está sellada, lo importante es que las primarias no sean un desangre entre compañeros. Hay que evitar los agravios. Lo que tenemos claro es que en Octubre tenemos que estar todos juntos para dar vuelta esta realidad que tanto nos golpea.
Pensando, si es posible, enfocados hacia Octubre, ¿Hay límites para la mentada unidad, o la diversidad es amplia? ¿Cuáles son las fronteras, digamos, para estar dentro del campo nacional y popular?
Una cosa es lo electoral, y otra son los límites en la construcción. El Papa Francisco habló de construir la cultura del encuentro en la diversidad. Yo creo que ese es el verdadero cambio que la Argentina necesita, no es ni un cambio de figuritas ni de modelo económico. Francisco nos interpela, y realmente lo complejo en la diversidad es encontrar un punto que se constituya en eje en común para llevar hacia adelante. Es un camino difícil de ser transitado y un gran desafío independientemente del resultado de la primaria.
La prédica de una especie de nuevo humanismo…
El Papa ni siquiera lo plantea desde el punto de vista religioso. Está tratando de que hallemos nuestros puntos en común para avanzar. La concepción está al final, para lograr todos nuestros objetivos y concretar ese camino del encuentro al que nos convoca Francisco. Y los liderazgos creo que van a ir moviéndose en esa sintonía. Los que no lo hagan demostrarán que sólo perseguían una ambición personal. Los dirigentes apostamos a un cambio desde lo colectivo, aunque quizás no todos tengan ganas de transitar. Debemos tener la predisposición para hallar nuestros puntos de acuerdo y aunar objetivos. Debemos tener la madurez para demostrar que podemos construir algo diferente.
La columna vertebral debe ser el peronismo, si bien los cambios se construyen entre todos los sectores. En este contexto estimo que van a surgir nuevos liderazgos, se vislumbran intendentes jóvenes que se van posicionando, con historia partidaria y también buenas experiencias de gestión. En resumen, si logramos trazar un camino sólido y de conjunto, la sociedad nos va a acompañar, y si no, seguirán esperándolos a los que les prometieron el “cambio” hace casi dos años.